Cuando trabajaba de contable siempre estuve convencido de que yo no servía para vender nada y menos a mí mismo y, por eso, durante mucho tiempo esperaba a que los resultados hablarían por sí mismos. Sin embargo, la experiencia y los reveses de la vida me enseñaron que si no vendes tus resultados, nadie los verá y, por tanto, nadie los apreciará.
Un buen emprendedor sabe que tiene que dar a conocer sus logros ya que esto le ayudará a tener una mayor estabilidad, desarrollo y satisfacción laboral y personal. Esta es una virtud importante que pueden tener muchas personas que destacan pero ni mucho menos es la única. Otras pueden ser tener ideas de negocio, ser buenos investigando, etc.
Pero hay una habilidad que para mi es la más importante y que tienen todos los emprendedores de éxito. La de saber adaptarse a su tiempo, algo que los autores califican de “inteligencia contextual”. Se trata de saber apreciar y adaptarse al entorno. Esta es necesaria para poder inventarse su propio camino ante el cambiante mundo en que nos encontramos.
El recorrido de este camino empieza analizando “dónde estoy”. Examinamos el contexto laboral actual, las necesidades y las oportunidades que se presentan. Después viendo “hacia dónde quiero ir” a través de los beneficios de crear nuestro propio empleo en relación a la seguridad laboral, estabilidad y satisfacción personal. Una vez que tienes todo esto claro, vas a necesita de una serie de herramientas e ideas para saber por dónde comenzar a hacerlo, es decir “como hacer el viaje” desde donde estoy hasta a donde quiero ir.
Llega el momento del ¿Cómo lo hago?
Existen muchas formas y seguramente ya tengas una idea de por dónde tienes que ir pero a mí me gusta resumirlo en tres tipos de ruta; La del emprendedor individual, la de crear tu propia agencia o la de convertirte en asistente. Para ser un emprendedor individual tienes que estar dispuesto a buscar continuamente tus propios cliente. La segunda opción es montar una agencia que cuente con un equipo de colaboradores. La tercera ruta es la de un asistente que tiene que formar parte de un negocio o equipo. La elección de una u otra ruta va a depender de muchas variables pero sobre todo en el tipo de tarea en la que destaques.
En cualquiera de las tres rutas no podemos dejar de conocer y utilizar las nuevas tecnologías del sector donde estés. En este punto tiene especial importancia las herramientas digitales que tienen como función la de facilitar este viaje. En la actualidad prima la productividad y la globalización, por este motivo es fundamental moverse con soltura en Internet.
Está claro que la cantidad de ingresos que vayas a recibir va a depender de tu habilidad como emprendedor pero necesitas que te reconozcan y dar a conocer tus méritos. De ahí la importancia de estar conectados al mundo online y de tener nuestra propia web profesional.
Para dar el salto hay que adoptar una actitud que se puede sintetizar con una expresión muy española: ¡Espabila! Es tiempo de sacudirse la pereza, perder la timidez y ejercitar el ingenio para seguir tu propio camino. Con mi Blog intento inspirarte para que descubras algo nuevo que te permita desarrollar de una forma distinta un empleo, facultad, oficio, ciencia o arte y para que, finalmente puedas percibir una retribución.
Cita: “La vida es como la haces. No puedes escapar. Anticipate a ella”. Talk Talk (Grupo musical)
Nota: “En su tiempo”. Tony Mayo y Niti Noria. Editorial Deusto.